Con todavía un tímidamente creciente 62% de pymes vinculadas al ámbito digital, la inversión en publicidad digital en España alcanza ya los más de 2.400 millones de euros anuales. Con un 94% de usuarios activos de Internet, la empresa moderna debe hacer un salto a lo digital para existir y enfrentarse a su competencia. Pero, ¿qué papel juega el marketing digital en todo ello y cuáles son las claves de su efectividad?
Presente y futuro digital
Preguntarse por qué hacer marketing digital no es extraño en la actualidad. Bajo la clara consolidación de los nativos digitales, la empresa moderna debe vincularse a la red para sobrevivir. Hoy en día, cualquier individuo basa casi todas sus actividades en una sola búsqueda en Internet. Y, por ello, la visibilidad de hoy es simplemente digital.
De hecho, el crecimiento de los anuncios en Internet demuestra cómo, progresivamente y sin ninguna pausa, el marketing ya es parte indivisible del mundo online. Desde sus estrategias revolucionarias y una inversión millonaria y que no deja de crecer, puede darse por sentado que su evolución tan sólo ha comenzado, pero promete hacerse con todo.
La digitalización en España en cifras
Hasta el momento, según datos del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, el 62% de las pymes guardan relación con el ámbito digital, al menos, en un nivel básico. Pero, a pesar de que un 24% de esas empresas ya practica activamente el comercio online, el salto total a la digitalización todavía queda lejos. Sobre todo, en el uso de la inteligencia artificial, los servicios en la nube y otros recursos digitales.
No obstante, el vínculo entre empresa y ecosistema virtual no ha dejado de estrecharse a lo largo del tiempo. Así lo demuestra el ascendente aumento de la inversión anual en publicidad digital en el país entre 2012 y 2021. Según Statista, pasando de los 880 a los más de 2.400 millones de euros invertidos. Del mismo modo, cada vez hay más empresas en las redes sociales, estrategia clave para captar clientes potenciales.
Especialmente, ya que, según los últimos datos de Hootsuite, un 94% de la población es usuaria activa de Internet, alcanzando además un 98,7% de usuarios de las redes sociales mayores de 13 años. Hecho que, junto con la media diaria de más de 6 horas en la red por usuario —casi dos horas al día en redes sociales—, hacen del medio digital el espacio de visibilidad y promoción indispensables de la empresa moderna.
¿Qué papel juega el marketing digital?
La dependencia del individuo contemporáneo con la red es ya parte capital del estilo de vida de cualquier sociedad. Por ello, el marketing se ha adaptado al medio digital de un modo muy certero. No sólo a sabiendas de que buena parte del cliente potencial, sobre todo joven, se encontrará en sus dominios. Si no que, además, conociendo la mayor asequibilidad del marketing en clave online frente al formato convencional.
De este modo, muchas empresas, tanto consolidadas como startups, utilizan ya estas estrategias mediante una cantidad ingente de contenido multimedia. A destacar en especial el vídeo y la fotografía publicitaria, pero también otras campañas de marketing online a través del emailing, el copywriting o el posicionamiento SEO. Al fin y al cabo, todo queda a la imaginación y las posibilidades, casi infinitas, que permite la red.
Todo lo que necesita una buena estrategia de marketing
Como sucede en cualquier otro propósito, lo principal para desarrollar una estrategia de marketing digital efectiva es dar con una idea original y memorable. Para ello, no sólo es necesario exprimirse el cerebro con guionistas y creativos. Más allá del concepto en sí mismo, es preciso analizar el mercado y la competencia, pero también el público. Un análisis que nos otorgará una perspectiva sobre las tendencias de la actualidad.
Tras ello, lo más indicado es apostar por una agencia de marketing profesional que pueda moldear, ubicar y capacitar esa idea para que cumpla con su objetivo. En ese sentido, cabe tener claro que toda estrategia de marketing que empleemos dependerá de qué queremos conseguir con ella y cómo. Desde el estilo narrativo del texto o el gancho del anuncio hasta el tono, el diseño e incluso la temática de nuestra campaña.
Cómo arriesgar desde la seguridad
A menudo, se da el caso que las campañas de marketing más sonadas son al final las que calan en el público. Sin embargo, todo riesgo debe tener implícita una seguridad en su decurso. Por ejemplo, ¿conectará bien el uso de un meme en clave publicitaria para atraer al público joven? La respuesta no es ese nexo en sí mismo, sino que radica en hallar especialistas que lo hagan realidad sin caer en el exceso ni en la mesura.
De nuevo, el propósito principal del marketing, en cualquiera de sus formas, no es otro que el de atraer y fidelizar clientes. Más que mostrando un producto, ofreciendo una experiencia inherente a éste. Y, por ello, no basta con tener presencia en Internet. Eso es sólo la punta del iceberg. Para conseguirlo, la empresa debe convertirse en un contenido único: aquel que marque la diferencia y logre destacar entre el resto.
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